El pueblo zápara vive en la región de la selva amazónica situada entre el Perú y Ecuador. Afincados en una de las regiones del mundo más ricas en biodiversidad, los záparas son los últimos representantes de un grupo etnolingüístico que comprendía muchas otras poblaciones antes de la conquista española.
En pleno corazón del Amazonas, han
desarrollado una cultura oral particularmente rica en conocimientos de su
entorno natural, como atestigua la abundancia de su terminología sobre la flora
y la fauna y su conocimiento de las plantas medicinales de la selva.
Este patrimonio cultural también se expresa
a través de mitos, rituales, prácticas artísticas y de su lengua, que es la
depositaria de sus conocimientos y de su tradición oral, representa también la
memoria de toda la región.
La Unesco declaró a la lengua zápara, de la
provincia de Pastaza, como Patrimonio Oral Inmaterial de la Humanidad. Desde el
2008 la organización internacional tiene inscrita a esa cultura como patrimonio
oral, además de sus manifestaciones culturales.
El reconocimiento se dio tras el esfuerzo
de la comunidad de mantener su lengua y costumbres ancestrales, pues hace poco
tiempo apenas dos personas del lugar hablaban el dialecto. En la actualidad se
conoce que alrededor de nueve lo hacen.
Para mantener las raíces culturales y
lingüísticas de los záparos se ha creado en el sitio una escuela bilingüe para
que desde pequeños conozcan la lengua de sus antepasados, la utilicen y eviten
la extinción del ahora patrimonio universal. La comunidad zápara vive de la
caza y de la pesca, su cosmovisión les dicta vivir al aire libre y en armonía
con la naturaleza. Según sus antepasados, el grupo étnico es descendiente de
los monos por su agilidad y modus vivendi.
En 1680 la comunidad estaba integrada por
cerca de 98.500 miembros, pero a principios del siglo XX la cifra se había
reducido a 20.000, según el Ministerio Coordinador de Patrimonio.
De acuerdo con el Ministerio, la reducción
dramática de la población respondió a la injerencia de empresas madereras y
petroleras, además de la mezcla con otros pueblos y culturas que han producido
un mestizaje y la casi extinción de este pueblo.
La lengua zápara, que significa “persona de
la selva”, quieren llevar a cabo un documental para que no se pierda el sonido
de la lengua, para lo cual han pedido fondos (unos 12.000 dólares) al
Ministerio Coordinador de Patrimonio Natural y Cultural de Ecuador.
Tradicionalmente confeccionan su vestimenta
con la corteza de un árbol, orientan las actividades de la comunidad a base de
los sueños que tienen.
La situación actual del pueblo zápara es
crítica y no se excluye el riesgo de extinción. En 2001, el número de záparas
no superaba los 300 (200 en Perú y 100 en Ecuador) de los cuales sólo 5, de más
de 70 años, hablan aún la lengua zápara.
Esperemos que tengamos muchos momentos importantes como Buscar trabajo en Argentina
ResponderEliminarel cual es uno de los mejores y más buenos.